Memoria es la capacidad de recordar los hechos los acontecimientos, las palabras, las acciones propias o de terceros, colores, sensaciones, canciones, tareas por realizar, cosas pasadas,...

La memoria muchas veces no responde a lo que de verdad queremos recordar, cuantas veces nos hemos dicho una y otra vez esto lo tengo que recordar, no puedo olvidarlo y finalmente acaba perdiéndose en el olvido, más de las que creemos. Es engañosa a veces pasados 10 años nos seguimos acordando de aquellas palabras que nos hirieron, o aquella mirada que se quedó en nuestro corazón, e incluso juega con nosotros a veces no sabemos lo que ha sido real de lo que ha sido sueño o simple creatividad imaginativa.

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Siempre he tenido una percepción un poco rara con respecto a mi memoria, ya que no recuerdo mucho excepto hechos aislados y momentos que recuerdas pero se ven tan externos y pocos cercanos, como si no hubiese sido yo la que estaba allí, como si de un juego se tratase que el principal objetivo fuese reconstruir la memoria de nuestro personaje principal pero que este ha sufrido daños y hay partes que no se pueden volver a reconstruir, perdidas en el disco duro de nuestra cabeza.

Diría que es engañosa, nubosa y confundida, pero a la vez rápida y táctica, no es fácil procesar todo lo que vivimos, todo va demasiado rápido y es difícil seleccionar elementos que preservamos y cuales van al olvido insignificante.

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